Qu1d6

Me queda una flor seca de recuerdo. 

También una tarjeta con tu nombre y la cajetilla de cigarros sin abrir que está encima de mi mesa. 

Quedaron palabras fluyendo sobre el papel y desvelos con tu nombre; cicatrices nuevas por toda la ciudad que aún no empiezan a supurar. 

Polaroids infinitas, libros prestados, un cepillo de dientes y pijamas olvidadas. 
Consejos de maquillaje, técnicas de besos perfectos y "background stories" personales. 

Me queda, igualmente, un poco de dinero para arrancarme las cejas y pintarme unas nuevas; hacerme un expansor y esperar que sea una ventana miniatura a otro mundo. 

El gato naranja que se me acurruca en el cuello cada vez que lloro y me pone la patita en la cara cuando ve que llevo cuatro noches en vela. 


Por último, aunque sea poca cosa, me quedan varios números. 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Inspirando

Off

Llueve con sol.