Corto y queda
Vivir aquí es como vivir en un cubo de rubick. Trato de verle el lado bueno a vivir sobre una tumba. Pero a mi me sabe húmeda y a mi padre seca como el clima de Monterrey en verano. Si le doy vuelta al cubo, yo subo las escaleras para no bajarlas nunca. Mientras escucho el eco de pasos en los pasillos de la casa. No hay colores que embonen, nada combina, todo está arruinado. Y cuando creo que tengo una cara del cubo hecha, la trasera grita movimiento y me aplastan las laterales. Entonces cierro los ojos, dejo que me aplaste todo y me aplaste y me aplaste y me aplaste. Y canciones de la prepa suenan en mi cabeza: You should’ve have killed me when you had the chance. You should’ve had killed me when you had the chance. You should’ve had killed me when you had the chance...